A propósito del escrito de las drogas, me parece pertinente instruir a los adolescentes. Desde mi experiencia recuerdo que a los 13 o 14 años era tedioso que mis padres, mis tíos o algún adulto me repirtiera el típico sermon acerca de la vida sobre los cuidados con la droga, el alcohol, etc etc.
Hoy a los 29 años, creo que es fundamental saber encaminar a los jóvenes, explicarles claramente las cosas, para que ellos puedan decidir que hacer, y por supuesto más que prohibirles sin razon el salir a discotecas, bares, etc. Como padres debemos inculcarle valores desde pequeños, y sobre todo para que aprendan a formar su criterio, y sepan manejarse en la vida, ello es algo esencial, que no se aprende en el colegio o en la universidad.
También creo que en la etapa de la adolescencia cuando esta en pleno fervor de las energía sexual y todo el desarrollo físico y hormonal, es importante orientar a los chiquillos a encauzar su energía. Me parece bien que los jóvenes salgan a divertirse a lugares nocturnos, a fiestas, pero todo debe ser en equilibrio, pues en ese afan de creerse un joven invencible, a veces las personas se van a los extremos, caen constantemente en borracheras, y se convierten en individuos sin sentido, y vemos que muchos jóvenes por vivir una vida dedicada al carrete a los 30 años ya son unos viejos.
Hay que aprender a disfrutar de lo bonito de ser joven, pues es una etapa en la que tenemos la energía vital para cosechar y luego en la adultez gozar de esos frutos.
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